
Habitar lo invisible una reseña de Felipe Quiroga sobre el cortometraje “Tucumán, sinfonía de una ciudad escondida”
Felipe Quiroga es un periodista radicado en la ciudad de Tucumán. Desde allí, nos envía una reseña sobre el cortometraje de Bernabé Quiroga y Sergio Olivera. Les compartimos, entonces, una reseña de Felipe Quiroga sobre el Film “Tucumán, sinfonía de una ciudad escondida”
¿Qué es lo que hace que una ciudad sea esa ciudad y no otra? En el prólogo de su libro “Las ciudades invisibles”, el escritor Ítalo Calvino plantea que “las ciudades son un conjunto de muchas cosas: memorias, deseos, signos de un lenguaje”. Al mismo tiempo, opina que cada vez es más difícil vivir en las ciudades, a las que llama “ciudades invivibles”, y comparte con preocupación la idea de la “megalópolis”, “una ciudad continua, uniforme, que va cubriendo el mundo”. El cortometraje “Tucumán: sinfonía de una ciudad escondida” (2023), de Bernabé Quiroga y Sergio Olivera, muestra con la mirada del género fantástico las consecuencias de esa transformación que acaso parece irreversible: la de las ciudades que pierden en forma progresiva su patrimonio arquitectónico, su identidad y su historia.
El corto, que fue recientemente premiado en el Festival de Cine El Cóndor Andino (Ecuador), se detiene en la arquitectura tucumana: contrapone planos de fachadas de viejas construcciones, algunas abandonadas, con imágenes de nuevos edificios, tan modernos e impersonales que podrían ser edificios de cualquier otra parte del mundo. Y es que sin características propias, las ciudades se vuelven intercambiables.
Quiroga y Olivera proponen además en su corto un mundo fantástico en peligro de desaparición. Hay brujas, monstruos y fantasmas habitando una ciudad oculta, que existe aunque no podamos -o no sepamos- verla. Estas criaturas funcionan como símbolo o metáfora de la identidad y de la memoria colectiva, de todo aquello que nos hace ser quienes somos. Hay historias y recuerdos impregnados en los ladrillos, en el cemento. Sí, los centros urbanos deben evolucionar y crecer, ¿pero a qué costo? Demoler lo antiguo no siempre es sinónimo de progreso. También puede ser una forma de construir olvido.
En ese sentido, el sociólogo y urbanista Lewis Mumford explica que, desde sus inicios, el capitalismo ha incidido en el trazado urbano buscando el lucro y la acumulación de capital. “En relación con la ciudad, el capitalismo fue, desde un comienzo, antihistórico”, dice y agrega: “La condición para el éxito pecuniario era despreciar el pasado, porque era un hecho consumado, y dar la bienvenida a lo nuevo, precisamente porque era un punto de partida y, por lo tanto, una oportunidad de buenos negocios”.
¿Qué es lo que perdemos cuando la ciudad en la que vivimos se pierde para siempre? ¿Qué es lo que queda? El cortometraje despliega la idea de que estamos unidos a los espacios que habitamos: los moldeamos y nos moldean. Pienso en la novela “Ciudad, 1951”, en la que la escritora tucumana María Lobo hace aparecer a la arquitectura como “aquella forma secreta que las personas usan a cada paso, aun sin darse cuenta, para pensarse a sí mismas y al mundo”.
La cámara en “Tucumán: sinfonía de una ciudad escondida” mira y también muestra. Nos muestra. Refleja: esas ventanas y terrazas y veredas y balcones y puertas y techos son lo que somos.
De eso estamos hechos. La palabra “fachada” deriva etimológicamente del italiano faccia: cara, rostro. Mirar la ciudad es mirarnos. Y también es una invitación a reflexionar sobre la postura que tomamos frente a los cambios que se producen a nuestro alrededor, los veamos o no. Porque ya se sabe: toda modificación que se hace a un espacio es ideológica.
“Tucumán: sinfonía de una ciudad escondida” incluye planos que muestran la Casa Histórica y el antiguo Mercado del Norte (que al día de hoy ya ha sido convertido en un centro comercial con modernos locales), construcciones cargadas de enorme peso histórico y cultural que son parte de la vida y la memoria de los tucumanos. Es innegable el aporte del patrimonio arquitectónico al sentido de pertenencia, y es así en todo el mundo, por lo que habitantes de cualquier ciudad pueden sentirse identificados con el debate y las ideas que el corto busca despertar.
Una voz en off acompaña las imágenes en “Tucumán: sinfonía de una ciudad escondida”. “El tiempo corroe tanto como el olvido y el desinterés”, dice en tono melancólico el narrador. La cámara está fija en las construcciones, en las casas, en los monumentos, mientras las personas atraviesan la ciudad, caminando sin ver.
Referencias “Una reseña de Felipe Quiroga”:
https://eternacadencia.com.ar/nota/el-prologo-de-las-ciudades-invisibles/5487
https://planetadelibrosar0.cdnstatics.com/libros_contenido_extra/58/57124_TPC_Ciudad%201951.pdf
Para ver el cortometraje:
Felipe Quiroga (San Miguel de Tucumán, 1985). Es licenciado en Comunicación Social y magíster en Periodismo. Es autor del libro de cuentos “El ruido que hacen los loros” (2022) y de la novela “Chikito” (2023).
Poesía, cine y actualidad.