Catalina Belmar – Narrativa

Catalina Belmar

Catalina Belmar – Narrativa

Breves comentarios sobre su vida

Antes de conocer la narrativa de Catalina Belmar, debemos conocer al menos unos pocos detalles de su vida. No serán muchos, ya que los pocos datos que logramos recabar sobre la autora, son los provistos por ella misma. Encontramos en ello un valor. Sobre nuestra narradora decir lo siguiente: nació en el año 2002, en Santiago de Chile. Actualmente, pareciera estar allí, pero no lo tenemos claro. Sin embargo, es alumna regular de la carrera “Artes de la Escritura” en la Universidad Nacional de las Artes.

Convocatoria Sub 30

Por otro lado, queremos contarles a nuestros apasionados lectores que, el que leerán a continuación, es uno de los textos seleccionados en la convocatoria Sub 30 de Espías Rusos. Como ya les hemos mencionado, a lo largo de este tiempo iremos publicando a cada uno de los seleccionados a quienes no queremos dejar de agradecerles por su maravilloso trabajo.

Reconstruir la memoria: ¿Quién fue José Contreras?

“Lo has logrado, te has transmutado; eres real,

ya te elevas, vuelas alto y con alas de verdad.”

JOSEPH L. CONTESI

I Primera parte

Cuando le pregunté a Denisse si se hablaba en el círculo familiar sobre la homosexualidad de su padre se rio fuerte. Y me dijo, que no, nunca, nada. Sin embargo, era un secreto a gritos dentro de la familia. Ella se enteró cuando tenía ocho años. Recuerda una esquina de Concepción, en el sur de Chile, estar yendo a casa y a su mamá gritando: “Lo que pasa es que tu papá es homosexual.” Luego de eso, asume que debe haber preguntado qué significaba aquello. Lo siguiente que recuerda es el llanto de su madre. A fines de 1991, los tres habían viajado desde Santiago hasta Concepción, capital de la región del Bío-Bío, a vivir una vida distinta. Al día siguiente, hija y mamá fueron a un centro de llamadas. A Denisse la dejaron fuera de la cabina e intuyó que mamá les hablaba a los abuelos, los maternos. Les cuenta su descubrimiento. Lo saben desde 1992. José era gay.

Primera parte

¿Quién fue José Contreras? Quién fue ese hombre que Denisse recuerda como un padre un poco ausente, pero no mantiene una sensación de carencia. Ella tiene cuarenta y dos años. Cuando le pido una anécdota de infancia, me da dos. Me cuenta de una presentación en la escuela con seis o siete años. Su compañera de curso se enfermó y ella obtuvo el solo del baile. Estaba emocionada, pero José no la vio porque él siempre llegaba tarde. Su hija recuerda esa mala costumbre entre risas. Ella no llega tarde a ningún lado.

La segunda anécdota es un par de años antes, en prebásica. Tiene que hacer una actividad de manualidades, de esas que sólo los padres pueden ayudar a resolver. José la ayudó demasiado y fueron pillados. En medio del reto de mamá, recuerda la complicidad entre los dos, la jugada por parte de él. Denisse concluye que, como todo padre, fue uno torpe. Uno que siempre llegaba tarde, pero con un regalo bajo el brazo. A sus ojos, él era un mensajero que sentía la responsabilidad de crear un ser humano bueno.

II Segunda parte

José y su esposa Coya fueron padrinos de bautizo de Camila en el año 2000. Seis años antes, cuando volvieron a Santiago, conocieron a la madre de su ahijada. Ambas mujeres estudiaban el Técnico en Enfermería. El círculo familiar, que Denisse define como los abuelos, incluye también a las hermanas de Coya, los sobrinos de Coya y los esposos de las tres mujeres. Por esos años, Lina y Camila ya eran parte de la familia.

segunda parte

Cuando reviso el archivo de fotos de los Oehlmann-Strahalm le digo a Camila, mi hermana, que en las pocas fotos en las que se encuentra a José, él se ve genuinamente feliz con ella. Hay un bebé regordete, nacido en 1995, entre sus brazos. Ella no tiene recuerdos de esos años, pero me comenta de una sensación de seguridad cuando dormía entre Coyita y José, en una cama matrimonial que se encontraba en el segundo piso de Antonio Varas, comuna de Ñuñoa. Antes de comenzar esta crónica, Camila no podía recordar nada de su padrino. Me dice que algunas personas tienen la capacidad de sacar de su vida a la gente sin importar nada más. No sabe si fue porque su madre la quiso proteger del distanciamiento o fue el orgullo de quienes jamás se han llevado bien, pero le parece que todos los adultos olvidaron que ella también tenía un vínculo con José.

segunda parte

Lina lo recuerda como el esposo de su mejor amiga y el padrino de su hija. Ella no habla mal de la gente, menos de los muertos. Aun así, charlamos sobre el incidente de Viña del Mar. Habían viajado desde Santiago hasta la Quinta Región para disfrutar la playa un fin de semana. Y tan amable como era José, también era sumamente cambiante. Ellas habían cambiado los pasajes de vuelta en bus y a José no le gustaron los asientos nuevos. Entre risas, siempre dicen que se armó la casa de putas. Les gritó, insultó, trató de lesbianas y se fue. Las dejó solas con todo el equipaje. En vida, José preguntaba cuándo Lina le iba a pedir disculpas. Ahora Coya se pregunta cómo lo hizo para llegar antes que ellas a la casa de sus padres.

III TERCERA PARTE

Coya me dijo que fue la persona que mejor conoció a José y que por favor la llame para hacer esta entrevista. Ella está vieja y está sola. Hablamos entonces de Coya y José. Se conocieron en 1978. Ambos vendían esa famosa chequera de los 80’ con la que podías pagar un crédito mes a mes y, al finalizar el pago, te entregaban el producto. Trabajaban en Santiago, pero José venía desde Antofagasta, al norte de Chile. Por tres años intercambiaron cartas, primero como amigos y después como pololos. José le pidió matrimonio en 1981, después de que ella lo siguiera hasta Antofagasta, cuando él trabajaba como paramédico en una pesquera. Se casaron un año después en el norte y por el civil.  Se volvieron a casar en Santiago por los testigos de Jehová.

tercera parte

Cuando le pregunto a Coya si sabía que José era homosexual, se queda callada. Nunca dice la palabra gay, homosexual o maricón. Dice, en cambio, que él hacía tonteras con otros hombres. Que a las diez de la mañana salía con la excusa de ir a comprar el diario y volvía a las diez de la noche. Que inventaba estar en la guardia y, después de eso, ya no sabía nada más de él. Se enteró porque un chiquillo dejó una carta en la casa. No estaba dirigida a ella, pero la leyó igual. Todas las respuestas a las separaciones, a la distancia, a los abandonos estaban ahí. Ese mismo día fue que le contó a su padre y a su madre, pero no lo dejó. Para eso, faltarían un par de años más.

tercera parte

Coya se harta, lo echa de casa, pero vuelve. Siempre vuelve. La relación continúa, porque Denisse llora pidiendo por su papito y lo mal que la pasa su papito. El matrimonio retoma la rutina de compartir la misma cama y vivir en la misma casa una y otra vez. El punto de quiebre llegó cuando la operaron y le hicieron una histerectomía total. Le dijo a José que no aguantaba más, que cuidara a Denisse esos días que estaría en el hospital y que, a la vuelta del postoperatorio, esperaba no verlo más. Él cuidó a su hija, le dejó una carta y nunca más volvió. Aun así, él siguió involucrado con la familia Oehlmann-Strahalm. Iba a ver a sus suegros, les cocinaba, los invitaba a la playa.

tercera parte

Ellos murieron el 2008 y el 2009. En el funeral del Tata, Coya se dio cuenta de que José respiraba distinto, raro.  Le pidió que fuera al hospital, que se tratara lo que sea que tuviera. Lo que tenía era VIH. Pero eso se supo después de que él estuviera tres días en la casa de su hija, enfermo. La última noche, un miércoles, tuvieron que ir a Urgencias. Internaron a José en la UCI. Por primera y única vez padre e hija hablaron de ese tema tan tabú en la familia. Su padre le dijo que sí, era gay y lo fue toda la vida. El SIDA se estaba comiendo su cerebro. Tres semanas después el tío José falleció. Cuando Denisse fue a desocupar el último departamento en el que su padre vivió, sólo había un texto que rezaba: «Dios también ama a los gay».

tercera parte

José y Coya nunca se divorciaron. ‘José venía de una familia cristiana, pero fue testigo de Jehová hasta que lo excomulgaron por ser homosexual. kJosé está enterrado en la misma tumba que sus suegros, en Santiago, porque Coya avisó que se estaba muriendo en la UCI, pero nadie viajó por él. 0José era tímido, amable. Cuando se enojaba, tartamudeaba. ,José le pidió a su esposa tener otro hijo y ella le dijo que deseaba nunca haberse casado con él. José era rescatista, pero murió trabajando en centros de medicina alternativa, atraído por el estudio del iris. -José era un estudioso de la metafísica. José construía castillos en el aire. 1José le escribió un poema a su hija antes de nacer. .José pensaba que iba a morir joven, decía que iba a morir joven, y al final lo hizo.

Para conocer más sobre la autora:

Poesía, cine y actualidad.

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